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- Out 5, 2021
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Monica Seles revela que padece miastenia gravis: “Es un nuevo comienzo”
La exnúmero uno del mundo y leyenda del tenis afronta el desafío más duro de su vida tras ser diagnosticada con una rara enfermedad autoinmune que provoca debilidad muscular y fatig
Una campeona frente a su reto más difícil
En el salón de la fama del tenis hay un hueco especial para Monica Seles, ganadora de nueve Grand Slams —ocho antes de cumplir 20 años— y una de las jugadoras más dominantes de los años noventa. Ahora, más de dos décadas después de su retirada, la extenista yugoslava ha revelado que padece miastenia gravis autoinmune, una enfermedad rara que afecta a la comunicación entre nervios y músculos, provocando síntomas como visión doble, caída de párpados, fatiga y dificultad para masticar.
El momento en que supo que algo iba mal
Seles relató que notó los primeros síntomas jugando con niños y familiares. “No le daba a la pelota y creía ver dos pelotas. Son señales que no deben ignorarse. Me llevó un tiempo hablar de ello abiertamente, porque es difícil”, confesó. Al recibir el diagnóstico, su reacción fue de incredulidad: “¡¿Qué?!”.
Resiliencia como forma de vida
La extenista ha decidido hacer público su caso para dar visibilidad a la enfermedad y animar a otros pacientes. “Siempre he necesitado empezar de cero”, afirma, recordando momentos clave de su vida: su llegada a Estados Unidos sin hablar inglés a los 13 años, la presión de la fama a los 16 o el ataque con arma blanca que sufrió en 1993 durante un partido en Hamburgo. “Ahora, tras mi diagnóstico, también es un nuevo comienzo”.
Filosofía de superación
Como mentora en su academia, Seles transmite a sus alumnos la importancia de adaptarse a los cambios: “Siempre tendrán que adaptarse. La pelota bota y tienen que ir a buscarla. Eso es lo que estoy haciendo ahora mismo”. Su mensaje es claro: la misma determinación que la llevó a conquistar el tenis será la que utilice para plantar cara a su enfermedad.
Un legado que inspiró a toda una generación
Monica Seles no solo dejó huella por sus títulos, sino también por su capacidad de regresar a la élite tras uno de los episodios más traumáticos en la historia del deporte. Después de ser apuñalada por un espectador en 1993, estuvo más de dos años alejada de las pistas, pero volvió para ganar el Abierto de Australia en 1996 y competir al más alto nivel. Su historia de superación personal ha servido de ejemplo para deportistas de todo el mundo, y ahora afronta una batalla diferente, pero con la misma garra que la convirtió en leyenda.
Estrella Digital
La exnúmero uno del mundo y leyenda del tenis afronta el desafío más duro de su vida tras ser diagnosticada con una rara enfermedad autoinmune que provoca debilidad muscular y fatig
Una campeona frente a su reto más difícil
En el salón de la fama del tenis hay un hueco especial para Monica Seles, ganadora de nueve Grand Slams —ocho antes de cumplir 20 años— y una de las jugadoras más dominantes de los años noventa. Ahora, más de dos décadas después de su retirada, la extenista yugoslava ha revelado que padece miastenia gravis autoinmune, una enfermedad rara que afecta a la comunicación entre nervios y músculos, provocando síntomas como visión doble, caída de párpados, fatiga y dificultad para masticar.
El momento en que supo que algo iba mal
Seles relató que notó los primeros síntomas jugando con niños y familiares. “No le daba a la pelota y creía ver dos pelotas. Son señales que no deben ignorarse. Me llevó un tiempo hablar de ello abiertamente, porque es difícil”, confesó. Al recibir el diagnóstico, su reacción fue de incredulidad: “¡¿Qué?!”.
Resiliencia como forma de vida
La extenista ha decidido hacer público su caso para dar visibilidad a la enfermedad y animar a otros pacientes. “Siempre he necesitado empezar de cero”, afirma, recordando momentos clave de su vida: su llegada a Estados Unidos sin hablar inglés a los 13 años, la presión de la fama a los 16 o el ataque con arma blanca que sufrió en 1993 durante un partido en Hamburgo. “Ahora, tras mi diagnóstico, también es un nuevo comienzo”.
Filosofía de superación
Como mentora en su academia, Seles transmite a sus alumnos la importancia de adaptarse a los cambios: “Siempre tendrán que adaptarse. La pelota bota y tienen que ir a buscarla. Eso es lo que estoy haciendo ahora mismo”. Su mensaje es claro: la misma determinación que la llevó a conquistar el tenis será la que utilice para plantar cara a su enfermedad.
Un legado que inspiró a toda una generación
Monica Seles no solo dejó huella por sus títulos, sino también por su capacidad de regresar a la élite tras uno de los episodios más traumáticos en la historia del deporte. Después de ser apuñalada por un espectador en 1993, estuvo más de dos años alejada de las pistas, pero volvió para ganar el Abierto de Australia en 1996 y competir al más alto nivel. Su historia de superación personal ha servido de ejemplo para deportistas de todo el mundo, y ahora afronta una batalla diferente, pero con la misma garra que la convirtió en leyenda.
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